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Apilador eléctrico, dinamiza las cargas y descargas de mercancías

Apilador-electrico

¿Qué son y cómo funcionan los apiladores eléctricos?

Un apilador eléctrico es una de las herramientas más utilizadas en sectores industriales y logísticos ya que permite tanto la carga como la descarga de mercancías pesadas. Su principal ventaja es que son capaces elevar grandes volúmenes de cargas, facilitando así las tareas de apilado en diferentes alturas.

Su versatilidad permite poder hacer uso de estos equipos en cualquier área o superficie en la cual se requiera la apilación o transporte de forma rápida, segura y eficaz.

Características de los apiladores eléctricos

Los apiladores eléctricos están fabricados principalmente de acero, un material que permite garantizar una durabilidad y seguridad eficaz. Gracias a este componente, si se hace un mantenimiento correcto y un uso adecuado de los equipos podemos obtener una larga vida útil de estos.

La mayoría de los modelos eléctricos disponen de una equipación compuesta por horquillas que permiten el manejo de palés europeos y disponen también de una bomba hidráulica de alta presión con batería GEL que genera la potencia necesaria para monitorizar el equipo.

Su funcionamiento es muy sencillo, las horquillas inferiores se introducen debajo de los palets y gracias con los comandos instalados en la parte superior del apilador puedes guiar el manejo de las mercancías.

Consejos de seguridad a tener en cuenta para el uso del apilador eléctrico

Asegurar que la carga esté bien sujeta

Previo a cualquier movimiento que se quiera realizar con el apilador eléctrico, se debe comprobar que las cargas se encuentran bien sujetas y son estables para manejarlas. También se debe tener en cuenta la colocación y la altura de las mercancías a transportar ya que una altura muy elevada podría restar visibilidad al conductor incrementando así el riesgo en su manejo.

 Para asegurar una mayor sujeción haga uso de cuerdas o flejes para asegurar las cargas. El campo de visión del que maneja estos equipos debe ser amplio, por lo que deben prestar atención a persona so obstrucciones que pueda haber en sus áreas de trabajo. 

Mantener una distancia y una velocidad adecuada

La velocidad es un factor decisivo a la hora de la manipulación de las mercancías ya que un exceso podría provocar la desestabilización de la carga y con ello su caída. Cuando se hace uso de los apiladores eléctricos, la combinación de la velocidad y los giros cerrados es un factor clave para los desplazamientos. La distancia de seguridad frente a los apiladores es muy importante también, por eso siempre es necesario asegurarse de que dispone de espacio suficiente para detenerse con seguridad.

Uso del equipo de trabajo

Se debe hacer uso de los escalones y asientos provistos a la hora de acceder al apilador eléctrico. Debemos asegurarnos de utilizar una posición cómoda antes de empezar a trabajar, así como un acceso fácil a los comandos del apilador eléctrico, también es importante abrocharse el cinturón de seguridad que tienen estos equipos ya que permite proteger al operario frente a cualquier impacto que se pueda ocasionar. Para garantizar la mayor seguridad posible se debe mantener en todo momento brazos, piernas y cabeza dentro del apilador. 

Inspección rutinaria de los equipos

Una revisión exhaustiva previa al inicio de la jornada laboral puede prevenir posibles fallos que se puedan dar. Así pues, la persona encargada de la supervisión de las apiladoras eléctricas, debe informar si identifica cualquier tipo de problema al personal cualificado encargado de las reparaciones. Las simulaciones y exámenes de seguridad deben realizarse de forma periódica para asegurar así un buen funcionamiento de los equipos y crear unos buenos hábitos de trabajo entre los operarios.

Uso de ropa adecuada

Los operarios de las apiladoras eléctricas, deben vestir apropiadamente. Dotarlos de unos zapatos de seguridad correctos, cascos duros, entre otros elementos de seguridad es un elemento importante que no podemos descuidar. No se deben tener prendas de vestir que no estén adheridas al cuerpo del operario ya que estas podrían impedir la visibilidad de los equipos de control de la apiladora.

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